En estos momentos más que nunca, muchos clientes nos plantean problemas de tesorería derivados de la situación actual.
Las líneas ICO han ayudado (a las empresas a las que han llegado) pero para muchos sectores no es suficiente.
Incluso las empresas que nunca han dejado de trabajar o que ya han recuperado cierta normalidad están sufriendo tensiones de tesorería por adaptarse a la situación de sus clientes o proveedores.
Hay que estar preparados para lo peor. Y eso implica preparar la estructura de circulante de tu empresa para sobrevivir. Hay que reforzar la caja.
- Con pólizas y líneas de crédito puedes disponer de liquidez para gastos recurrentes o necesidades puntuales.
- Con el factoring puedes reducir tus plazos de cobro a clientes.
- Con el confirming y el confirming pronto pago puedes ofrecer a tu proveedor la opción de cobrar antes.
Las pérdidas se superan pero si una empresa no tiene liquidez, es incapaz de hacer frente a sus pagos a proveedores, a los impuestos o a las nóminas de sus trabajadores... Eso sí puede significar su fin.
Refuerza tu estructura de circulante antes de que sea demasiado tarde.